En 1983, otro cuarteto
volvía a representar una clase de educación primaria, aunque esta vez intercambiando los
papeles masculinos por los femeninos. Nos referimos a la agrupación “La
señorita Maribel y tres niñas de EGB”, bajo la autoría de Juan Rivero y que
contaba entre sus componentes con Miguel Pérez Calvente “el mellao”, obteniendo
el primer premio. Su simpática profesora, que representaba al Ministerio de
Educación y “Paciencia”, intentaba enseñar a tres colegialas que, como grito de
guerra, dejaron un estribillo para la Historia del Carnaval:
Qué follón,
mamita que follón,
cómo está
lo de la educación.
Las niñas unidas
jamás serán
vencidas.